El pensamiento Maya evidentemente se enfocaba tambien en el Sol y lo observaron, rastreando el camino a lo largo de la ecliptica. Ellos lo seguÃan durante el año, partidarios presumiblemente de su camino a lo largo del horizonte como tal. En Chichen-Itza durante el ocaso del sol la serpiente de luz sube arriba por el lado de la escalera de la pirámide llamado "El Castillo" en el primer dÃa de Primavera y equinoccio del Otoño.
La estela o monumento conmemorativo, el primero encontrado completo en el sitio, tiene una longitud aproximada de 2.0 metros, 55 centímetros de ancho y seis centímetros de espesor y fue tallado en un roca metamórfica.
En el monumento prehispánico se observa la imagen de perfil de un jerarca maya, quien se yergue sobre un banco y porta una bolsa de copal en una de las manos, lleva como atavío un taparrabo enlazado con una banda, sandalias y un tocado de plumas.
A sus pies y boca arriba, colocado sobre el banco, yace otro personaje de dimensiones menores, con el torso abierto en señal de sacrificio o dominio.
Por la ubicación y el estilo de la estela, se deduce que ésta refiere a un señor maya venido de una región cercana, quien llegó y dominó el sitio que hoy conocemos como Lagartero, alrededor del año 1000 después de Cristo.